La Rioja
MARÍA JOSÉ LUMBRERAS

El edificio de la subestimación de Lobete cayó ayer. Las máquinas, en la parcela situada a la altura de Eliseo Pinedo junto al parque Felipe VI, lo demolieron desde primera hora. Una vez que entró en funcionamiento la instalación que la suple en La Portada, ADIF se fue dedicando a recuperar los elementos aprovechables de la misma hasta el desmantelamiento definitivo que se produce ahora.

Esta subestación empezó a funcionar en los años cincuenta y su derribo permitirá la desafección de unos terrenos cuyo fin último es el residencial.

«El derribo de la subestación supone dar otro paso para ir configurando los solares o parcelas de resultado que Logroño Integración del Ferrocarril (LIF) tiene intención de poner a la venta en el último trimestre de 2023», calcula Santiago Millares, responsable de esta sociedad que configuran todas las administraciones implicadas en el soterramiento logroñés.

En estos momentos LIF, ADIF y Ayuntamiento de Logroño se encuentran en pleno proceso de transmisión de suelo de ADIF a la Sociedad del Soterramiento (LIF) a cuenta de la obra ferroviaria realizada para que esta pueda venderlo y, con ello, pagar parte de las tareas realizadas estos años. Miyares reconoce «el importante esfuerzo que están realizando las administraciones para que el proceso «se pueda culminar durante 2023 y la venta de parte del suelo pueda hacerse

La Sociedad del Soterramiento encargará el primer semestre de 2023 una tasación de las parcelas residenciales

también en ese año». Si bien la venta será por procedimiento público, «hay promotores locales con absoluta solvencia que, desde hace meses, vienen preguntando» por ella, añadió este responsable. No hay precio de referencia todavía. Depende de la tasación de suelos que la Sociedad encargará en el primer semestre de 2023.

El suelo del entorno del soterramiento que ha de ser transferido –127.000 metros cuadrados residenciales– se reparte en tres áreas del plan, en Lobete, en el entorno de las estaciones y en las proximidades de Vara de Rey.

La venta de suelo residencial ha constituido uno de los pilares de la operación del soterramiento desde que se planteó porque era la fórmula que se usaba a modo de garantía en los bancos que concedían el préstamo para pagar las obras precisas. Dados los retrasos que se fueron acumulando, las entidades bancarias requirieron que la garantía fueran los presupuestos de las administraciones implicadas. Y, así, Gobierno regional y Ayuntamiento han ido sufragando las cuantías, cerca de 80 millones cada una de las partes, la última el año pasado, de 30 millones en el caso del Consistorio. En cualquier caso, el suelo residencial sigue ahí, propiedad de ADIF y a la espera de que se consume la transmisión, a la que debería seguir una reparcelación.

El proyecto de integración del ferrocarril a su paso por la capital de La Rioja contemplaba el traslado de esta subestación de tracción, la de Lobete, para liberar ese suelo urbano. De hecho, forma parte de la fase 1 del soterramiento, lo mismo que otras intervenciones ya realizadas o por terminar, como la reforma del mismo nudo de Vara de Rey con Duques de Nájera.

https://www.larioja.com/logrono/coches-circulan-vara-20221102113634-nt.html