Diario La Rioja
La integración del ferrocarril busca su sello
El proyecto de soterramiento de Logroño inicia el proceso de certificación de su sostenibilidad con BREEAM para convertirse en referencia
El soterramiento de Logroño, a falta de culminar su fase 1 con la solución definitiva al nudo de Vara de Rey, aspira a convertirse en un referente como entorno urbano sostenible y, además, quiere poder acreditarlo. El proyecto de integración del ferrocarril en la capital de La Rioja promovido por LIF 2002 ha iniciado por ello el proceso de certificación de su sostenibilidad con el estándar internacional BREEAM Urbanismo, «metodología de referencia mundial para mejorar, medir y certificar de forma independiente la sostenibilidad de entornos y comunidades urbanas».
Así lo explican desde la propia sociedad de integración, que recuerda que no debe perderse de vista que «es una actuación de gran relevancia para la ciudad desde el punto de vista urbanístico y social dado que, tras muchos años, sus vecinos se beneficiarán de la eliminación de la barrera que suponía la vía del tren y de la creación de un gran parque en el centro que facilitará la biodiversidad, aliviará la presión urbana y favorecerá la continuidad en su diseño y la movilidad peatonal»./p>
Mª Cruz Gutiérrez, directora técnica de LIF 2002, valora positivamente que Logroño vaya a superar el mismo examen que importantes regeneraciones urbanas en Europa y en el mundo. Un sello de calidad medioambiental como el que se persigue –sólo 52 proyectos urbanísticos han recibido este certificado– y que podría llegar en la primavera, a su juicio, supondrá «valor añadido». Y desde el Ayuntamiento ya se piensa incluso en poder captar fondos europeos en el futuro.
«Este proyecto es ejemplar en muchos sentidos. La propuesta llevada a cabo estableció como primer requisito generar un gran espacio verde público que equilibrase en la medida de lo posible la centralidad histórica generando un polo de atracción al sur. Se utilizaron para ello las condiciones naturales del asentamiento de Logroño, en especial la abundancia de agua en el freático, y por tanto se ha primado la creación de un parque que en esas condiciones fuese fácil de mantener y agradable de usar», explica Cruz.
Una «apuesta por la sostenibilidad a corto, medio y largo plazo», que se traduce en la creación de una gran supermanzana con viales periféricos y viales 100% peatonales en su interior, con el 80% de terreno permeable y con materiales de bajo impacto… Para Javier Torralba, director de BREEAM España, «el tránsito de la barrera física de las vías del tren a un espacio de convivencia, respetuoso con el ambiente y el bienestar de las personas, situará a Logroño en la vanguardia de las ciudades sostenibles».
Supondrá, al mismo tiempo, la creación de un corredor ecológico que unirá las zonas verdes periféricas y que contará con un sistema urbano de drenaje para la recogida del agua en la superficie y su utilización como riego. Y las 1.200 viviendas proyectadas en el PERI Ferrocarril, tal y como apuntan, contarán con fuentes renovables de energía.